MIRANDO HACIA ATRÁS: ENERO

El pasado mes de enero ha sido un mes poco aprovechado, fotográficamente hablando. Esto ha sido debido a que ha coincidido que los dos fines de semana que hemos acudido a nuestro lugar de esparcimiento, el Valle de Hecho, el tiempo no ha acompañado. Sin embargo los fines de semana que hemos permanecido en Zaragoza coincidía con mejor clima. Aún así, hemos aprovechado lo que hemos podido.

 

Un paseo por la ribera del río Gállego

 

Una soleada mañana decidimos dar un paseo por las orillas del río Gállego a la altura de la urbanización Las Lomas del Gállego en Villanueva de Gállego. Allí hay una finca que me trae recuerdos de infancia cuando acudía con mis padres a visitar a una hermana de mi madre cuyo marido trabajaba allí, y aprovechábamos para darnos algún baño que otro en el río, siempre con mucho cuidado que ese río es muy traicionero. Tiempo después, ya más mayor, volví al mismo lugar, casi siempre en invierno, para practicar la pesca a mosca del barbo. Esta mañana de enero vimos los caminos de aproximación al río inundados y llenos de maleza por lo que no pudimos acercarnos al lugar que queríamos. Fuimos paseando por el camino que sigue el curso del río y vimos algún que otro pescador. Las orillas estaban un tanto desangeladas y enmarañadas, muy espesas con arbustos y árboles tumbados o medio tumbados, desnudos. Comentamos que hubiera estado muy bien un poco de cencellada o dorondón, pero la mañana era ventosa y soleada. Otra vez será…

 

Por Guara

 

Nuestro amigo Manuel Bernal me llamó un día para ver si queríamos acompañarle a fotografiar un Tejo en una zona entre Radiquero y Adahuesca. Israel no quiso acompañarnos ese día, así que acudí con Manuel a una gasolinera cerca de su pueblo en donde nos reunimos con Paco Serrano, Conchita Muñoz y su marido Rafael. Desde allí partimos hacia Alquézar, en donde nos esperaba Nacho Pardinilla y un amigo suyo. Nos hizo un día fabuloso y disfrutamos de un guía, Nacho, de lujo, porque se conoce esa zona como nadie. Nos acercamos con los coches por la Sierra de Sevil hasta el Mesón de Sevil. Desde este lugar nos dirigimos andando hasta un lugar encima del cañón del río Balcés. Las vistas de los nevados picos del pirineo y de los Tozales de Guara y Cubilars nos mantuvieron un buen rato entretenidos con nuestras cámaras fotográficas. Después nos dirigimos hacia el objeto de nuestro viaje, el quejo que hay cerca del Castillo de los Santos. A estas alturas del trayecto ya se empezaba a acusar la caminata por parte de algún miembro de la expedición. Después de fotografiar el quejo y lo que queda del castillo emprendimos el camino de regreso al mesón de Sevil, en donde habíamos dejado los coches. Ya eran las 3 de la tarde cuando llegamos. Cogimos la manutención y nos metimos en el mesón para poder sentarnos y comer tranquilamente saboreando alguna que otra exquisitez, como un preparado con trufa negra que nos trajo Paco y Trenza de Almudébar que llevó Manuel. De vuelta a Alquézar, antes de despedirnos unos de otros, todavía nos dio tiempo a fotografiar su colegiata  e Santa María con la cálida luz de la tarde. Un día inolvidable.

 

La Selva de Oza Nevada

 

Uno de los fines de semana que subimos a Hecho tuvimos suerte. Una tregua en el mal tiempo nos permitió acercarnos hasta la Selva de Oza. A pesar de la nubosidad, la luz que era buena al ser bastante uniforme y también la ausencia de viento contribuyeron a disfrutar durante tres horas del paisaje nevado. Pudimos llegar hasta la misma Selva de Oza pues el quitanieves había dejado la carretera limpia. A lo largo del recorrido hicimos varias paradas para usar nuestras cámaras. Oza estaba preciosa con un buen manto de nieve, pero al acercarnos a la pista de Espata vimos que los cazadores habían colocado el cartel anunciando la cacería, por lo que dimos media vuelta y nos quedamos en la entrada de la Selva. Al día siguiente ya salió peor la mañana y decidí ir hasta el Refugio de Lizara. NI Israel ni la climatología me acompañaron al refugio. Para olvidar.

 

El Ebro se desborda

 

Tanta nieve y luego agua, las consecuencias estaban claras, inndaciones. Los ríos que se alimentan del Pirineo a tope, los embalses a punto de rebosar. El Ebro también a tope inundando los campos que la riada va encontrando a su paso. El día 22 de enero a las 18:00 horas dan la máxima altura a su paso por Zaragoza, asi que me digo "no puedo perder la oportuidad" y salgo hacia los galachos de Juslibol para dejar testimonio con mi cámara de la riada. La tarde muy nubosa amenaza lluvia, pero se mantiene sin caer ni una gota. Me subo encima de los acantilados para tener una mejor perspectiva. Al final no ha sido tan grande la riada, pero disparo una docena de fotos para dejar constancia. Otra riada será....

Quedada asafonera

 

A petición de mis colegas en ASAFONA organicé una quedada para el fin de semana en el Camping Valle de Hecho. El mal tiempo estuvo a punto de dar al traste con la cita ya que nos cogió en la semana que más ha nevado en el Valle de Hecho. Tuvieron que meter una pala escavadora para quitar la nieve que cubría las calles del camping, ya que de otro modo no podríamos haber entrado hasta los bungalows con los autos. El mal tiempo lo compensamos con la convivencia entre personas con una misma afición, proyecciones de fotografías y un taller de Lightroom. Pero a pesar del mal tiempo, le echamos ganas y el sábado por la mañana, a pesar de la lluvia, nos acercamos hasta la Boca del Infierno, andando, porque desde Forestales ya no se podía continuar con los coches. Medio metro de nieve por la carretera y riesgo de aludes aconsejaban no dejar pasar. Después de la Boca del Infierno nos dirigimos al Refugio de Gabardito. Aquí si que había pasado el quitanieves y había dejado la carretera bastante limpia, aunque algo estrecha si se cruzaban los coches, como así ocurrió en un par de lugares. En el refugio pegaba con algo de fuerza el viento y a ratos caía nieve. Un buen tazón de caldo nos entonó el cuerpo y nos ayudó a mantener el tipo.

 

Tras dar buena cuenta del apetitoso menú en el Restaurante Castillo de Acher en Siresa, viendo que en el Valle no podíamos hacer gran cosa, decidimos acercarnos al puerto de Santa Bárbara para desde allí divisar las cumbres de la Jacetania e intentar fotografiarlas aprovechando el atardecer. No tuvimos suerte con el atardecer pero si un momento de alegría cuando ya estábamos recogiendo los equipos y vimos que aparecía por encima del Cuculo una espléndida luna llena. Antes de la cena en el bar-restaurante del camping, en una sala de reuniones que pusieron a nuestra disposición hicimos varias proyecciones de fotografías, quedando gratamente impresionados con la que nos ofreció Uge de su viaje a Namibia. Tras la cena, un taller de Lightroom a cargo de Chavi concluyo la jornada del sábado.

 

El domingo salió bastante mejor en lo referente al clima, por lo menos no llovía, y aunque bastante nublado, la ausencia de viento nos hizo disfrutar de una agradable salida por el Valle de Aragüés del Puerto, pudiendo llegar con los coches hasta el Refugio de Lizara. Cuando abandonábamos Lizara ya comenzaba a caer aguanieve. Tras una abundante y buena comida en el bar-restaurante del camping dimos por concluida la quedada. Una mención especial para Pedro, el encargado del camping Valle de Hecho, que en todo momento estuvo pendiente de que no nos faltara de nada y también a sus empleados. La cena y la comida muy bien, y por lo que me comentaron mis compañeros, los bungalows muy acogedores. Repetiremos en otra época del año….

 

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